Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen. Hechos 2:1-4
Después de lo mencionado en el texto bíblico hoy Domingo recordamos Pentecostés, festividad religiosa de gran significado para los cristianos en todo el mundo. Pentecostés tiene sus raíces en el judaísmo. Originalmente, se conocía como la celebración judía de Shavuot, que tiene lugar siete semanas después de la Pascua judía.
En el Nuevo Testamento, se relata que durante Pentecostés, los discípulos de Jesús estaban reunidos en Jerusalén cuando el Espíritu Santo descendió sobre ellos en forma de “lenguas de fuego”. Este evento marcó el inicio de su misión de difundir el mensaje de Jesús por todo el mundo.
En esta festividad, los cristianos conmemoran la venida del Espíritu Santo a los apóstoles y seguidores de Jesús. Hoy en las distintas congregaciones luteranas de Colombia y del mundo se celebra con actividades programadas para animar y compartir la palabra de Dios y los sacramentos para el fortalecimiento del alma y el espíritu de los fieles que asisten a cada uno de los lugares donde se celebra esta importante fecha del cristianismo.
Pentecostés es un tiempo de alegría y felicidad, marcando el momento en que los apóstoles recibieron el Espíritu Santo.
