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La bíblia invita a leer entre líneas

Cuenta la profesora Malka Kotzer, de hebreo bíblico, que una de sus discípulas de nombre Margarita le comentó: he leído el libro de Ester y me fascinó la historia, pero, observó, \»esperaba que Dios apareciera e interviniese pero ¡Él no aparece ni siquiera una sola vez!”. Ella, tiene razón. En Ester no se encuentra la palabra Dios por ninguna parte. Sin embargo, Él estás presente: basta con leer entre líneas, aconseja Malka.

La observación de la profesora Kotzer, sobre la necesidad de escudriñar en la profundidad de los textos bíblicos, para encontrarse con la presencia de Dios no es una idea loca. “El hebreo es un idioma de secretos” señala, como acontece con “el secreto de Ester”. La llamada kabala, es, por ejemplo, un mensaje oculto –del cual ya se habló aquí en la web- al igual el mensaje “cifrado” –por decirlo de alguna manera- de Ester para denotar la presencia de Dios.

La festividad de Purim rememora “la salvación de los Judíos del edicto genocida de Amán, el gran visir Persa tal como está escrito en el libro de Ester. Ester tuvo que ocultar su religión para poder ascender gradualmente dentro de la jerarquía real, acercarse más al rey y lograr salvar a su pueblo del edicto de Amán. Este libro Bíblico es particularmente atípico porque el nombre de Dios no aparece explícitamente en ningún lugar”, señala la profesora Malka.

¿Pero quiere esto decir que es veraz –como le dice Margarita a Malka- que Dios “no aparece” en el libro de Ester? Explica la doctora Kotzer: “Cuando la Reina Ester descubrió que Aman quería aniquilar a todos los Judíos en el imperio Persa, inicio su plan de acción, diciendo: \»Si place al rey, vengan hoy el rey y Amán al banquete que le tengo preparado\»(Esther 5:4).

“Ahora, invita, lee cuidadosamente el texto Hebreo original: Las primeras cuatro letras de las primeras cuatro palabras de esta frase, forman juntas, el nombre Hebreo de Dios: Y-H-W-H. Vemos que Dios está presente después de todo, y en el momento más decisivo del plan de Ester. El Hebreo es un idioma de secretos. La palabra Dios no aparece en el libro Ester, pero su presencia y la fe de Ester son reveladas en el idioma Hebreo”.